Conoce lo que esconden las Casas de Ámsterdam

Casas estrechas

Lo que más caracteriza a las casas holandesas, específicamente las de Ámsterdam, es su reducido frente. Suelen ser construcciones altas pero angostas, y esto tiene una explicación histórica. En el pasado, los impuestos se calculaban en función del tamaño de la fachada.

Las casas de Ámsterdam que tenían frentes más grandes debían pagar impuestos más altos. Esta peculiaridad arquitectónica permite identificar, a simple vista, las casas que pertenecían a familias adineradas.

Casas alargadas

Las casas suelen tener una fachada pequeña pero en el interior son hogares largos y con habitaciones grandes y espaciosas.

Escaleras empinadas

La mayoría de las casas en Holanda tienen escaleras, pero estas difieren mucho de las escaleras a las que estamos acostumbrados. Las escaleras en las casas holandesas son extremadamente empinadas, con peldaños pequeños y con muy poca distancia entre uno y otro. Incluso en algunas casas, las escaleras tienen giros, aunque no llegan a ser escaleras en espiral, no son completamente rectas. Se cree que la forma de las escaleras se debe, nada más y nada menos, que a la maximización del espacio en las casas.

Fachadas inclinadas

Si observamos las fachadas de las casas, notaremos que están inclinadas hacia adelante, lo que da la sensación de que están a punto de caer hacia adelante. Esta inclinación en la construcción tiene un propósito específico: evitar dañar las fachadas durante mudanzas o al renovar muebles y electrodomésticos. Subir estos objetos por las estrechas escaleras de las casas sería una tarea casi imposible, por lo que esta ingeniosa solución permite llevar a cabo estas actividades de manera más sencilla y segura.

Ganchos y Poleas

Si miras con detenimiento en lo más alto de las casas, encontrarás ganchos o un sistema de poleas que se utilizan para subir muebles y otros objetos al interior de las viviendas. Es bastante común ver cómo suben desde lavadoras hasta pianos mientras caminas por la ciudad.